En los últimos años, la comunidad científica ha estado investigando y trabajando en soluciones innovadoras para abordar el creciente problema de las enfermedades transmitidas por mosquitos, como el dengue, Zika y chikungunya. Una de las estrategias más prometedoras ha sido el uso de la bacteria Wolbachia como una herramienta de control efectiva.
En ese contexto, este viernes 9 de junio, en las instalaciones del Hotel Crowne Plaza, Paraguay pasó a la historia al apostar por esta estrategia amigable y sostenible, con la socialización de las documentaciones de base que apuntan a las “Nuevas estrategias en la lucha contra las arbovirosis”, ante las altas autoridades de la cartera sanitaria, de diversas instituciones del Estado, la OPS/OMS Paraguay, la academia y la comunidad científica.
El Dr. Gustavo Chamorro, director general del SENEPA, explicó al público que no se puede desconocer la existencia de nuevas estrategias y que debemos ir por ellas: “viendo la experiencia de otros países en donde se ha implementado, y tenemos referencias, según la literatura, de que en aquellos países donde la implementación data de ocho o diez años y más, la disminución alcanza más del 90%.”
Finalizando su alocución, el Dr. Chamorro manifestó las altas expectativas puestas en esta nueva tecnología: “tenemos plena confianza de que podemos llevar adelante ese proceso, plena confianza de que Paraguay prontamente podrá tener resultados importantes, con una implementación efectiva y siendo parte normal de la estrategia normal de lucha contra el vector ”.
Posteriormente, se llevó a cabo la presentación oficial del equipo técnico conformado por Resolución Ministerial S.G. N° 248/2022 y los avances del “Proyecto Wolbachia Paraguay”, a cargo de la Dra. Ana Ibarrola Vannucci, coordinadora de implementación.
Conozcamos más sobre Wolbachia
Wolbachia se ha utilizado en varios programas de control de vectores en diferentes países, cuyos resultados fueron alentadores. Esta bacteria pasa de una generación a otra en el proceso de la reproducción de los mosquitos, pudiendo reducir significativamente su capacidad de transmitir enfermedades.
La estrategia presenta varias ventajas. En primer lugar, es una técnica amigable con el medio ambiente y es una solución sostenible a largo plazo, ya que una vez establecida, la bacteria se mantiene en la población de mosquitos sin necesidad de intervenciones adicionales.
Es importante destacar que no es una solución única para el control de enfermedades transmitidas por el mosquito Aedes aegypti, será un complemento importante de las estrategias usuales y deberá estar acompañado con otras medidas, como la eliminación de criaderos de mosquitos y el uso de repelentes.
La colaboración interinstitucional y el apoyo de la comunidad científica es esencial para garantizar la efectividad y seguridad de esta biotecnología valiosa y prometedora en la lucha contra las arbovirosis.
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