SENEPA despliega actividades de prevención de las arbovirosis en puntos estratégicos

Ante el incremento sostenido de la movilidad de personas durante las festividades de fin de año, el Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (SENEPA) pone en marcha el Plan Operativo de Fin de Año 2025, con el objetivo de fortalecer las acciones de control vectorial y evitar la transmisión de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya todo el territorio nacional.

Esta estrategia anual se orienta a proteger la salud de la población paraguaya en un período caracterizado por el aumento de desplazamientos, reuniones sociales y actividades turísticas, factores que favorecen la dispersión del Aedes aegypti, principal vector de las arbovirosis.

Considerando este escenario, el plan prioriza distritos de alta relevancia epidemiológica, entomológica, turística y fronteriza, donde se intensificarán las intervenciones preventivas mediante acciones integrales de control vectorial y educación comunitaria.

Las actividades se concentrarán en puntos estratégicos de alta concurrencia, tales como terminales de ómnibus, aeropuertos, puestos de control fronterizo y aduanero, iglesias, hoteles, sitios turísticos, hospitales y otros espacios públicos, con el fin de promover prácticas para evitar la proliferación de mosquitos.

Entre las principales acciones contempladas se destacan:

• Educación y concienciación comunitaria: desarrollo de charlas informativas y entrega de materiales educativos para reforzar las medidas de prevención domiciliaria y comunitaria.
• Inactivación de criaderos: intensificación de la eliminación y tratamiento de recipientes con agua estancada, promoviendo prácticas seguras como el uso de arena húmeda en floreros y la correcta disposición de objetos útiles e inservibles.
• Refuerzo del control químico: ejecución de nebulizaciones focales y espaciales, conforme a criterios técnicos, en zonas priorizadas y puntos de mayor riesgo.

El SENEPA reitera el llamado a la ciudadanía a acompañar y sostener estas acciones desde los hogares y comunidades, adoptando hábitos preventivos de forma permanente, como parte del compromiso colectivo para vivir unas fiestas de fin de año seguras.