- El SENEPA, a través del Programa Nacional de Control de las Leishmaniasis, desarrolla diferentes actividades para mitigar el impacto de esta enfermedad en la comunidad.
- Mediante la descentralización del diagnóstico y tratamiento en los servicios de salud, en lo que va del año, cuatro pacientes con diagnóstico de Leishmaniasis Visceral y uno con Leishmaniasis Tegumentaria, oriundos del departamento de Concepción, se encuentran recibiendo tratamiento, presentando cuadros estables.
El Dr. Fernando Núñez, jefe del Programa Nacional de Control de las Leishmaniasis del SENEPA, dio más detalles al respecto en conversación con los medios de comunicación, dando a conocer que en el 2022 se registraron 131 casos de la enfermedad en el territorio nacional.
«Es una enfermedad vectorial que se transmite a través de flebótomos (karachã), no son mosquitos», enfatizó el Dr. Núñez, debido a la confusión existente sobre el vector transmisor de las Leishmaniasis, relacionado, a veces, con los mosquitos transmisores de las arbovirosis.
Recordó a la ciudadanía que las Leishmaniasis se presentan en dos variantes; la visceral, que es potencialmente mortal si el paciente no se diagnostica y trata oportunamente, y la tegumentaria, caracterizada por causar heridas con bordes redondeados en la zona de la picadura, pudiendo manifestarse también en la nariz y en la boca, generando congestión y sangrado, con consecuencias irreversibles si no se acude a tiempo a consulta.
Según datos brindados por el programa nacional, los cinco pacientes están estables. En cuanto a los afectados con Leishmaniasis Visceral, tres se encuentran internados con mejoría y uno cuenta con el alta correspondiente. Por el lado del paciente con Leishmaniasis Tegumentaria, el mismo recibe su tratamiento de manera ambulatoria.
El Programa Nacional de Control de las Leishmaniasis, con el acompañamiento de otras dependencias del SENEPA, prosigue con la misión permanente de articular estrategias con los servicios de salud de todo el país para la detección temprana y tratamiento en los pobladores, así como efectuar actividades de concienciación y control comunitario.
#ConozcamosLasLeishmaniasis
Las Leishmaniasis en humanos se pueden presentar clínicamente de dos formas: tegumentaria y visceral, siendo esta última su forma más grave que, de no ser tratada a tiempo, puede ocasionar la muerte.
En la forma tegumentaria se generan lesiones ulceradas en la piel y/o mucosas y en la visceral se produce fiebre prolongada, desgano, anemia, pérdida de peso y agrandamiento de órganos internos.
Una de las medidas más importantes para controlar la dispersión de la enfermedad es a través del control vectorial en las viviendas, eliminando la basura orgánica (restos de frutas, verduras, hojas en descomposición, entre otros) para evitar que el vector -flebótomo o karachã- se reproduzca.
Para prevenir la picadura del flebótomo es primordial utilizar repelentes de insectos, prendas de vestir que cubran todo el cuerpo, colocar tela metálica en puertas y ventanas y usar mosquiteros en las habitaciones de descanso.